¿Envolver al bebé recién nacido aumenta el riesgo de muerte súbita?

¿Qué significa «envolver» a nuestro bebé recién nacido?

Por envolver o “swaddling” en inglés nos referimos a la envoltura ajustada de una manta alrededor de un bebé para reducir o minimizar los movimientos de los brazos y las piernas. Se trata de una herramienta común para calmar a los bebés y se usa frecuentemente durante el período de recién nacido (primeros 21 días de vida) para crear una sensación similar al ambiente estrecho y ajustado del útero antes del nacimiento.

Este es el aspecto de un bebé envuelto:

Esta técnica se ha utilizado durante siglos para ayudar a calmar a los bebés y controlar su temperatura corporal después del nacimiento. Lo más probable es que ya haya visto a su bebé envuelto si dio a luz en un hospital y las enfermeras se escabulleron con su bebé en algún momento (generalmente para el primer baño). Cuando le devolvieron a su bebé, lo más probable es que estuviera envuelto en una manta de hospital.

La prevalencia de esta práctica en todas las culturas da validez a su utilidad. Sin embargo, algunos investigadores querían averiguar si también tenía riesgos.

¿Por qué «envolver» a un recién nacido aumenta el riesgo de muerte súbita?

Este nuevo estudio analizó los datos de bebés durmiendo en tres regiones geográficas (Inglaterra, Australia y los Estados Unidos) durante un período de 20 años. A partir de los datos analizados, los investigadores encontraron que envolver al bebé aumenta el riesgo de muerte súbita, especialmente a medida que aumenta la edad del bebé. Por ejemplo, los bebés envueltos de 6 meses de edad o más tenían el mayor riesgo de muerte súbita.

Este hallazgo, que los bebés más mayores tienen mayor riesgo, es lógico porque los bebés mayores tienen más fuerza para moverse, pero aún carecen de una coordinación bien desarrollada. Por ejemplo, los bebés recién nacidos no pueden sostener la cabeza debido a la falta de fuerza en el cuello. Sin embargo, a los 3-4 meses, los bebés pueden mantener la cabeza levantada incluso cuando se los mueve de una posición reclinada a una sentada. Del mismo modo, los bebés recién nacidos no pueden darse la vuelta porque carecen de la fuerza del brazo. Sin embargo, la mayoría de los bebés aprenden cómo darse la vuelta en 3 meses más o menos, aunque algunos pequeños patean las piernas con tanta fuerza que se dan la vuelta antes.

¿Qué significa todo esto? Bueno, si un bebé se da vuelta y se pone boca abajo, pero le falta fuerza o coordinación para levantar la cabeza o girar en la dirección opuesta, se quedará atascado respirando en el colchón. Si además de respirar en el colchón, están envueltos y el pañuelo se afloja y parte del mismo cubre su cabeza o cara, entonces el bebé tendrá menos aire disponible para respirar y, por lo tanto, volverá a respirar su propio aire exhalado.

Por lo tanto, tiene sentido que los bebés mayores que pueden rodar y moverse más tengan más probabilidades de ponerse boca abajo y tener mantas cubriendo sus cabezas, lo que aumentaría el riesgo de muerte súbita.

Además, los investigadores encontraron que la posición de los bebés al dormir envueltos influyó en el riesgo de muerte súbita. Los bebés que se colocaron de espaldas mientras dormían tenían el riesgo más bajo mientras que los bebés que se colocaron boca abajo tenían el mayor riesgo. Todas las principales organizaciones pediátricas recomiendan que todos los bebés, envueltos o no, duerman de espaldas. No se recomienda dormir boca abajo nunca.

Finalmente, los investigadores notaron que no había una definición precisa de la técnica de envolver al bebé. La imagen del niño de arriba muestra a un bebé envuelto en una fina sábana de lino. Sin embargo, una búsqueda rápida en Internet revelará una cantidad sorprendente de modos y aparatos para envolver bebés. Los investigadores no aclaran las técnicas empleadas y cómo pueden haber afectado los resultados.

5 Consejos para reducir el riesgo de muerte súbita en el recién nacido

Por lo tanto, la información que se desprende de este estudio para reducir el riesgo de muerte súbita incluye:

1. Mantenga al bebé boca arriba para dormir. Todos los bebés deben ser colocados boca arriba para dormir. Ningún grupo pediátrico importante recomienda dormir boca abajo.
2. Se ha demostrado que el uso de la técnica de envolver aumenta el riesgo de muerte súbita a medida que los bebés crecen. Los bebés de 6 meses o más tienen el mayor riesgo. Limite el uso de esta técnica a los primeros meses de vida. Asegúrese de usar una manta ligera.
3. Los bebés deben dormir en superficies firmes. Evite los sofás, las mantas gruesas o las camas de agua.
4. Mantenga la cuna lo más limpia posible. Retire todas las mantas sueltas, almohadas, animales de peluche y mascotas del área de dormir.
5. Evite fumar cerca de los bebés. El humo aumenta los riesgos de muerte súbita.

Los beneficios de envolver al bebé para calmarle y controlar su temperatura corporal se deben sopesar frente al riesgo de muerte súbita.

*Pease AS, Fleming PJ, Huck FR, et al. Swaddling and the risk of sudden infant death syndrome: a meta-analysis. Pediatrics. 2016; doi: 10.1542/peds.2015.3275